La energía es el elemento clave para entender en qué momento económico nos encontramos. El tipo de interés, en un mercado libre, sería un indicador que iría de la mano con la realidad energética, pero se mantiene gravemente manipulado, precisamente para tapar la realidad energética.
El sistema económico basado en el dinero “fiduciario” o “fiat” necesita de una inflación constante para poder existir. La deflación se nos vende como un problema, y es repetido en todas las universidades del país que una inflación moderada es necesaria para la economía.